Asfixias Mecánicas
La asfixia, como hemos expuesto hasta el momento, es una frecuente causa de fallecimiento, común a no pocos procesos patológicos. Se apellida “mecánica” cuando proviene del impedimento mecánico de la penetración de aire en los pulmones.
La Anoxia o privación de oxigeno puede llegar a producirse cuando las necesidades de oxigeno de las células del organismo no son cubiertas. Estas necesidades son satisfechas cíclicamente a través de cuatro mecanismos fundamentales: la ventilación, el vehículo hemoglobina, la circulación y los intercambios gaseosos. Cualquier impedimento que actué sobre uno solo de ellos provoca la anoxia, la cual no puede ser vista desde un ángulo generalizador sino desde sus diversas variantes:
Anoxia de Ventilación: Se produce dada la rarefacción de la atmósfera, o sea, cuando se respira una atmósfera pobre en oxigeno, lo que causa que disminuya la saturación de hemoglobina en sangre arterial. Fenómeno conocido como anoxemia. Este tipo de anoxia también puede ser provocado por obstrucción o compresión mecánica de las vías respiratorias (asfixias mecánicas y algunas naturales, como: atelectesia pulmonar, bronquitis, asma bronquial, etc.), por trastornos de la dinámica respiratoria (compresión torácico-abdominal, neumotórax, pleuresías, enfisemas, parálisis toxicas, etc.) o por dificultades en los intercambios gaseoso pulmonares, afecciones pulmonares agudas o crónicas, neumonía, edema agudo del pulmón, esclerosis pulmonares, entre otros tipos de afecciones.
Anoxia Circulatoria y Anoxia de Estasis: Estos fenómenos se deben a trastornos de la circulación mayor o menor, congestión o apoplejía pulmonar, embolias o trombosis de las arterias pulmonares, insuficiencias cardiacas, etc.
Anoxia Anémica: Es ocasionada por una seria disminución cualitativa o cuantitativa de la partícula hemoglobina provocada por intoxicaciones por monóxido de carbono (CO) o por productos metahemoglobinizantes, anemia hipocromica, hemorragia, etc.
Anoxia Tisular: Es el resultado del descenso de la tensión diferencial arterio venosa de dioxigeno (O2) o de la inhibición de los fenómenos oxidantes intra circulares que impiden la utilización de dicho oxigeno de la sangre arterial por los tejidos (intoxicación cianhídrica).
La privación brusca de oxigeno desencadena una serie de trastornos de tipo sensoriales (desaparición de la sensibilidad), motores (perdida de la motricidad), psíquicos (perdida de la conciencia), que pueden llegar a ser sanguíneos, hormonales o incluso renales, sin descartar daños de carácter nervioso o cardiovascular, provocando el sincope anoxico seguido de muerte en solo algunos minutos. A la compresión del nervio neumogástrico, característica de los ahorcados, se le atribuye la aparición de equimosis subpleurales y subpericardicas o Manchas de Tardieu, así como las congestiones pulmonares y las frecuentes complicaciones neumónicas. El aumento del anhídrido carbónico (hipercapnia) es factor facilitador de alteraciones térmicas, la glucosuria y trastornos cardiacos, las alteraciones de los reflejos esfinterianos ano vesicales, la erección del pene y la midriasis.
Las manifestaciones clínicas que puede llegar a presentar un individuo que sufra de privación de oxigeno o anoxia se dividen en cuatro fases. Una primera fase conocida como Fase Cerebral donde dicho sujeto padece trastornos subjetivos, tales como: vértigo, desvanecimiento, zumbidos en los oídos, estado de angustia, entre otros; pasados un minuto y medio aproximadamente, sobreviene de manera intempestiva la perdida del conocimiento, la respiración se torna lenta y se acelera el pulso. En una segunda fase o de Excitación Cortical y Medular, que demora unos 2 minutos aproximadamente, aparecen convulsiones generalizadas en el rostro, en las extremidades y los músculos respiratorios. Los movimientos peristálticos propician la emisión de orina y la salida de materias fecales, se activa la secreción de saliva y sudor y, de forma inconsciente, puede producirse erección y eyaculacion. La sensibilidad y los movimientos reflejos desaparecen progresivamente, el rostro se torna cianótico, el corazón de hace lento en su ritmo normal y se produce un ascenso considerable de la presión arterial. Ya en la fase tercera o, también denominada de Muerte de la Respiración, con una durabilidad que varia entre 1 o 2 minutos el proceso asfíctico avanza hacia una insuficiencia ventricular derecha que adiciona sus efectos cianóticos a los de la asfixia y en la cuarta fase ya centrada explícitamente en el corazón, este acelera repentinamente sus latidos, los cuales se vuelven irregulares y cada vez se hacen mas débiles e imperceptibles al pulso pero persistentes durante un lapso de tiempo mas o menos largo. Al concluir, los ventrículos de detienen en diástole, aun cuando las aurículas se mantienen presentando alguna contracciones.
En general en todas las asfixias es posible observar tres periodos diferentes:
1.- Periodo anestésico de corta duración, que lleva rápidamente a la pérdida de conocimiento.
2.- Periodo Convulsivo.
3.- Periodo asfíctico, en que se observan los trastornos respiratorios, intensa cianosis y coma.
La asfixia, cuando no es completa, puede no ser la causa de la muerte, sino los trastornos ocasionados a raíz de ella. El individuo puede presentar serias complicaciones como: congestión pulmonar, la cual si puede resultar mortal. También puede ocasionarse una neumonía o bronconeumonía y algunas trascendentes manifestaciones nerviosas que varían desde convulsiones, amnesia retrograda hasta alteraciones cardiacas. Por otra parte, las violencias ejercidas en la región del cuello, laringe o traquea, son capaces de provocar, por vía refleja, la muerte súbita por inhibición, que sobreviene sin convulsiones ni de forma agónica, sino por sincope respiratorio y cardiaco.
Signos Manifiestos en las asfixias, en sentido general:
Externamente el individuo que muere a causa de asfixia presenta: Livideces Cadavéricas, las que son precoces y de gran extensión debido a la fluidez sanguínea. Enfriamiento Cadavérico retardado, puesto que dicha fluidez sanguínea mantiene al cuerpo caliente. La Rigidez Cadavérica sobreviene lentamente, aunque de forma intensa y prolongada y en caso de muerte con convulsiones suele aparecer precozmente. Y la Putrefacción Cadavéricas se presenta rápidamente, dada la fluidez sanguínea.
De forma inconstante, el cadáver puede presentar cianosis en la cabeza y las manos, producto del aumento de la cantidad de hemoglobina reducida en el flujo sanguíneo, además de exoftalmia, protucion de la lengua, relajación de esfínteres y hongo espumoso.
En materia de signos internos, los principales son: el color negruzco, la coagulación lenta, la modificación del PH y el aumento del cociente, ya sea globular o plasmático. La sangre sufre disminución de la cantidad de oxigeno y se produce los que se hace llamar Hiperglicemia Cadavérica, pasadas 6 hrs. de la muerte por asfixia. En el encéfalo se produce en ocasiones, la hiperemia venosa y otras veces isquemia, hemorragias y, a veces, edema cerebral. Los pulmones, por lo general, sufren de enfisema, cogestión o edema; se presentan Manchas de Tardieu y de Paltauf, estas ultimas son mayores y mas claras, son manchas asfícticas que se han hecho hemolíticas. Ocurre el Estasis Sanguíneo a nivel del corazón provocando la dilatación de las cavidades derechas del mismo, las cuales se llenan de sangre, y el Estasis Venoso generalizado. Hay presencia de espuma aereada en laringe, traquea y bronquios y se produce congestión visceral.
Particularidades de las Asfixias Mecánicas:
Las asfixias mecánicas se conocen en el ámbito medicolegal como: El impedimento de entrada de aire a las vías respiratorias y que generalmente produce la muerte. Dentro de la tipología de asfixias mecánicas podemos encontrar cuatro variantes fundamentales:
• Ahorcamiento.
• Estrangulación.
• Sofocación. La cual puede ser provocada por:
. Oclusión de los orificios respiratorios.
. Oclusión de las vías respiratorias
. Compresión toraco-abdominal.
. Crucifixión.
. Confinamiento.
. Sepultamiento.
• Sumersión.
A) Ahorcamiento:
Esta modalidad del proceso asfíctico, como ocurre en los demás tipos de asfixias mecánicas, se produce por el impedimento de la entrada de aire a las vías respiratorias, en este caso, provocado por una constricción del cuello, operada generalmente por una cuerda en forma de lazo corredizo sujeta a un punto fijo por uno de sus extremos y sobre la cual hace tracción el propio peso del cuerpo.
El Ahorcamiento puede manifestarse de forma completa cuando queda suspendido sin que la punta de los pies, ni ninguna otra parte del mismo toque el suelo u otro objeto; y de forma incompleta en el caso de que el cuerpo roce algún otro objeto. Asimismo, serán ahorcamientos simétricos aquellos producidos por un nudo situado en la parte anterior o posterior del cuello y si el nudo es lateral, el ahorcamiento será asimétrico.
El ahorcamiento representa una de las manifestaciones suicidas mas frecuentes, aunque también, atendiendo a su etiología, puede ser accidental o resultar factible para disimular un homicidio. En el mecanismo de la muerte por ahorcamiento intervienen la asfixia, producida por la compresión de la traquea y por el rechazo de la base de la lengua por la pared posterior de la faringe –solo 15 Kg. son suficientes para que sobrevenga la muerte por ahorcamiento -la suspensión del cuerpo no es necesario que sea total, puesto que en el ahorcamiento incompleto basta tan solo la presión ejercida por la ligadura-; el shock inhibitorio, el cual se debe al reflejo provocado por la irritación traumática de los nervios del cuello y del simpático pericarotideo; la anemia cerebral brusca, en la que la compresión de las arterias carótidas y vertebrales determinan la interrupción rápida de la circulación cerebral, lo que explica la perdida repentina del conocimiento, presente desde el principio del ahorcamiento; y además, la muerte puede sobrevenir por sincope cardiaco sobre los cinco a diez minutos. En algunos casos los latidos cardiacos persisten por horas, pero la supervivencia se hace imposible pasados los primeros ocho minutos.
Dentro de la sintomatología presente en el proceso de ahorcamiento, se distinguen cuatro fases: dentro de la Fase Cerebral, la anoxia estimula el sistema nervioso central que se manifiesta en zumbidos de oídos, visión de luces centellantes, hormigueos y sensación de angustia. En la Fase Convulsiva, también derivada de la estimulación cerebral de grado más intenso. Aparecen convulsiones generalizadas en la cara, músculos respiratorios, extremidades, pudiendo eliminarse deposiciones y orina, eventualmente eyaculación. Esta fase es responsable de algunas lesiones externas que corresponden a pequeños traumatismos al colisionar el individuo con el medio que lo circunda. Durante la Fase Asfíctica ocurre la depresión de las funciones cerebrales, existe pérdida de la conciencia, coma profundo, cianosis intensa, con respiración superficial y lenta, relajamiento muscular y pérdida de reflejos. Esta fase es irreversible, la muerte es aparente y conduce a la siguiente fase, denominada de Muerte Real, donde desaparecen todos los signos vitales.
Las lesiones de carácter asfíctico o circulatorio son variables, al igual que los factores patogénicos productores de las mismas; el síndrome asfíctico se presenta discretamente en la mayoría de los casos, los pulmones se congestionan en la minoría mientras que el enfisema subpleural es mas frecuente. Son propensas a presentarse manchas de Tardieu. La congestión cerebral y la hemorragia meníngea son inconstantes. Se produce punteado petequial hemorrágico en la mucosa gástrica. Otros tipos de lesiones que se producen durante en el ahorcamiento son las traumáticas, que pueden presentarse en la región del cuello a causa de presiones y tracciones ejercidas por la ligadura sobre los tejidos y órganos de dicha región. En la superficie del cuello se evidencia el surco equimotico suprahioideo que puede ser hondo, caracterizado por manifestarse en canal, apergaminado (por desecación de la dermis cuando la epidermis ha sido arrancada, la piel se torna delgada y transparente) y blanquecino; o ancho, que puede ser suave, extenso, con bordes imprecisos.
El surco, en ambas variantes, es único, oblicuo, incompletamente circular, profundo en el centro del asa, lo cual quiere decir que el surco se interrumpe en la porción correspondiente al nudo en la que se nota una huella de profundidad. En el cuello de la mayoría de los muertos a causa de ahorcamiento, además del surco, se presentan otras lesiones profundas: pueden darse luxaciones o fracturas raquídeas. Las fracturas del hueso hioides se manifiestan con un alto grado de probabilidad; así como también las lesiones carótidas creándose una zona equimotica en la túnica externa y con la aparición de desgarros transversales en la túnica interna, los cuales son provocadas dada la poca elasticidad de la misma. También es frecuente encontrar equimosis titulares (tejido celular subcutáneo), musculares, laringeas y retrolaringeas; así como desgarros musculares con o sin infiltración sanguínea en las regiones supra e infrahioideas y esternocleidomastoidea.
En cuanto a las lesiones agónicas podemos acotar que generalmente se producen erosiones y equimosis diversas en las manos procedentes de contusiones contra un plano resistente o rugoso durante el periodo de las convulsiones.
Se manifiestan dos tipos de ahorcados:
Ahorcados Blancos: En ellos la muerte es consecuencia de un reflejo inhibidor (shock inhibitorio). La compresión vasculo nerviosa lateral se hace por igual, impidiendo la entrada y salida de sangre del cuerpo hacia la cabeza, produciéndose una isquemia cerebral. El nudo se encuentra situado en la región posterior del cuello.
Ahorcados Azules: No existe compresión total del paquete vasculo nervioso, dejando pasar la sangre a la cabeza sin posibilidad de retorno. En ellos predominan la cianosis facial, equimosis subconjuntivales y los trastornos circulatorios. Es frecuente encontrar en ellos el nudo de la ligadura de forma lateral.
B) Estrangulación:
La estrangulación se produce cuando se impide la entrada de aire a las vías respiratorias a causa de una compresión del cuello por una fuerza ajena a el: mano que aprieta el cuello o ligadura que lo rodea. Constituye una forma medicolegal de asfixia de origen, habitualmente, criminal y de muy difícil diagnostico en cado de huellas discretas. El proceso asfictico por estrangulación accidental o suicida es de muy rara frecuencia y solo es posible que sea realizado con ligadura.
En ambos casos, estrangulación manual o con ligadura, el mecanismo de la muerte se produce por asfixia ocasionada por compresión del conducto aéreo contra el plano pervertebral, por inhibición mortal o reflejo vascular cerebral.
Estrangulación Manual:
En esta variante de la estrangulación es frecuente la producción de síndrome asfíxico más o menos completo. El individuo presenta cianosis y equimosis puntiformes en el rostro, inyección de las conjuntivas, presencia de espuma en los bronquios, congestión de los pulmones, placas de enfisema pulmonar y manchas de Tardieu. En las superficies laterales del cuello pueden encontrarse equimosis redondeadas y estigmas ungueales procedentes de la presión de los dedos, que pueden estar también presentes alrededor de la boca y nariz; en los planos mas profundos del mismo pueden producirse hemorragias llamadas también lentejas de sangre, equimosis retrolaringeas producto del choque violento del bloque laringeo contra el plano óseo pervertebral. Además, se presentan con frecuencia lesiones carótidas y fracturas o luxaciones del aparato laringeo.
Estrangulación con ligaduras:
Es en este tipo de estrangulación donde mas se evidencian los fenómenos asficticos y los trastornos circulatorios provenientes de la compresión de las yugulares. En la zona del rostro el individuo presenta hiperemia y tumefacción, equimosis puntiformes que pueden manifestarse también en el cuello, la región toráxico y las conjuntivas, espuma en la laringe, traquea y bronquios, además de congestión en las vías respiratorias y en los pulmones, enfisema subpleural.
En el orden traumatológico, las lesiones producidas durante el proceso asfíctico-estrangulatorio solo permiten el mejor desenvolvimiento de el Diagnostico Medico Legal y son consecuencia de violencias ejercidas en el cuello, las cuales provocan excoriaciones superficiales, desgarros tisulares profundos y en la mayoría de las ocasiones viene acompañadas de fracturas. La huella dejada por la ligadura, la forma de enrollarla, los nudos que presenta son fuente de gran información para el medico legista a la hora de dar su parecer en el diagnostico.
El surco, en la estrangulación con ligadura, es habitualmente horizontal, circular, poco profundo, pálido, poco apergaminado. Puede darse , también, la posibilidad de una simulación de surco o “surco falso” el cual se puede manifestar de acuerdo a cuatro tipologias que define el doctor Simonin en su Tratado de Medicina Legal Judicial , las que exponemos a continuación:
• Surco Falso de Origen Natural, caracterizado por manifestar simples repliegues de la piel, suaves, blanquecinos, con epidermis intacta.
• Surco Falso de Origen Artificial, el que presenta también la particularidad de mantener la epidermis intacta.
• Surco Falso de Origen Patológico, evidente en el intertrigo de niños y mujeres obesas.
• Surco Falso Putrefactivo.
En la estrangulación con ligadura es menos característica la presencia de lesiones traumáticas profundas del cuello. Entre las más frecuentes están: equimosis en forma cilíndrica en la túnica externa de las arterias carótidas y las hemorragias en las partes más blandas.
En cuanto a las lesiones producto de la resistencia o lucha que ofrezca la victima a su victimario pudiéramos señalar, la presencia de herida contuza en la cabeza, equimosis y estigmas ungueales alrededor de la boca, los que podrían haber sido causados por ahogar los gritos de la victima, lesiones de defensa en manos y antebrazos y también lesiones de caída.
Para dar un diagnostico acertado el medico legista debe analizar dos cuestiones fundamentales, que no por ello dejan anulados todos aquellos análisis que implique cada caso en particular: la correspondencia del surco producido durante la estrangulación con ligadura con las lesiones en los planos profundos del cuello y el análisis de las lesiones, a veces discretas, en los planos superficiales del cuello, presentes en ambas variantes de muerte por estrangulación, así como la posibilidad de disimular la estrangulación con el aplastamiento o compresión del cuello accidental o suicida, dado que la estrangulación manual nunca pierde su carácter criminal.
Diferencias Entre la Estrangulación con Ligaduras y el Ahorcamiento Incompleto:
Existen marcados rasgos que distinguen a estas dos variantes de muerte por asfixia mecánica y los hemos agrupado atendiendo a los siguientes parámetros:
• Características del surco:En la estrangulación con ligadura, el surco dejado por la misma se caracteriza por ser horizontal, situado por lo general por debajo de la laringe, completamente circular, a menudo múltiple y uniformemente señalado. El ahorcamiento incompleto deja un surco oblicuo, casi siempre único, profundo, apergaminado, situado en la región suprahioidea y marcado a nivel del centro del asa.
• Presencia de síndrome asfictico: En la estrangulación con ligadura se evidencia con mucha intensidad mientras que lo hace de forma más discreta en el caso del ahorcamiento incompleto.
• Características de las lesiones: Se presentan en el orden traumático, en la estrangulación con ligadura, y son frecuentes las producidas por la lucha y violencia; mientras que en el ahorcamiento incompleto las lesiones mas notables son las agónicas, pudiendo señalarse las erosiones en las manos y livideces en las extremidades inferiores.
C) Sofocación:
Esta variante de asfixia mecánica se define como el impedimento a la entrada de aire a las vías respiratorias ocasionado por un taponamiento de las mismas. Es eventualmente consecuencias de accidentes, sobre todo el taponamiento facial, o forma de suicidio, aunque para este fin es una variante excepcional.
El Diagnostico Medico Legal se sienta en el descubrimiento, en ocasiones incierto, de las huellas reveladoras reflejo de la acción del agente asfixiante, como pueden ser: arañazos, excoriaciones, equimosis en el área externa de la boca y nariz ocasionadas, posiblemente, por las uñas y dedos del homicida, heridas en la lengua, hallazgo de cuerpo extraño o sus restos en las vías aéreas, células bucales encontradas en el instrumento facilitador de la muerte por asfixia, etc.
Las lesiones en muerte por sofocación no se manifiestan de forma constante, existiendo ausencia de las mismas en caso de muerte súbita o rápida, lo que impide al legista arribar a la conclusión de que la causa de la muerte haya sido criminal.
Dentro de la sofocación pueden distinguirse 6 modalidades, las cuales mencionamos en páginas anteriores. Sobre las mismas los libros y documentos consultados no echan mucha luz, baste decir que solo se refieren a la variante del confinamiento dentro de la que ahondan en los aspectos que siguen.
El confinamiento o sofocación por estancia forzada a un espacio confinado se caracteriza por las circunstancias de hecho (gran humedad en los objetos, vestidos y piel), lesiones de defensa (desgaste de las uñas). El síndrome asfictico es habitual; resulta de la rarefacción de la atmósfera, o sea, el aire viciado que se respira el cual se debe al empobrecimiento progresivo del contenido de oxigeno (O2), el aumento del contenido de dióxido de carbono (CO2), el desprendimiento de sustancias volátiles reductoras y malolientes procedentes del sudor y del aire expirado y el aumento de la humedad y la temperatura.
D) Sumersión:
Es la causa del impedimento de la entrada de aire a las vías respiratorias por la entrada de sustancias liquidas o semilíquidas a las mismas. Constituye una forma frecuente de suicidio a pesar de serlo también de accidentes. La Sumersión suicida también es probable como lo es el simulacro de Sumersión (inmersión de cadáveres) para encubrir un homicidio.
Se describen dos tipos de ahogados:
. Ahogados Azules o de fascie azul: Dentro de ellos se encuentran aquellos individuos que han luchado para escapar de la asfixia. En este caso el mecanismo de la muerte es un proceso largo y complejo. A la asfixia se le suma un traumatismo pulmonar intenso a causa de las fuertes inspiraciones irresistibles producto del exceso de ácido carbónico de la sangre asfictica. El agua alcanza, entonces, los alvéolos traumatizándolos. Se produce choque alveolar desencadenando una serie de trastornos a nivel pulmonar que culmina con la creación del hongo espumoso y la tumefacción pulmonar. Finalmente el ahogado traga una considerable cantidad de agua que llena estomago e intestinos.
Fases de la Sumergimiento-Asfixia: Este proceso asfictico de describe en cinco fases por las que transita el individuo en un periodo agónico hasta la muerte. Primeramente se produce una Aspiración de aire seguida de un periodo de Apnea Voluntaria que dura, aproximadamente 50 minutos. La tercera fase o Disnea Expiratoria Refleja de Origen Central o Laringeo se caracteriza por fuertes inspiraciones involuntarias con penetración del agua y espiración del aire, pérdida del conocimiento e invasión por el agua de las vías respiratorias. Precediéndola se encuentra la fase de Convulsiones Asficticas donde se produce una apnea agónica que termina con una fuerte inspiración final, aunque los latidos del corazón persisten durante 2 o 3 minutos. Esta fase desencadena a una última de Parálisis, Paro Respiratorio y Muerte.
. Ahogados blancos o de fascie blanca: Incluye Esta categoría a aquellos individuos que dentro de la sustancia liquida o semilíquida, no mueren por la aspiración de esta sino a causa del sufrimiento de un sincope mortal; o sea, no se ahogan realmente. Este fenómeno se conoce como Sumersión-Inhibición donde un estado inhibidor con estado sincopal (muerte aparente) se desencadena por contacto brusco de la piel, mucosas, aparato vestibular con el liquido donde se ahogan.
Atendiendo a los caracteres anatomopatológicos de ambos tipos de sumersion, Sumersión-Asfixia y Sumersión-Inhibición, es preciso acotar que en esta última no se manifiestan lesiones, puesto que el agua no penetra en los pulmones ya que se lo impide el paro brusco de la respiración y el corazón. Se dice, entonces, que la autopsia es blanca. No obstante, se puede producir en la mayoría de los casos un estado asfictico secundario sucediendo al sincope y es cuando el ahogado se torna de un azul pálido. Los individuos que sufren la Sumersión-Asfixia se reconocen por presentar cianosis del rostro, equimosis puntiforme en el rostro y las conjuntivas, aunque de manera excepcional. También se manifiestan en ellos, de forma poco frecuente, congestión de la laringe, equimosis subpleurales, hemorragias superficiales y congestión del cerebro. Y es notable la presencia de Manchas de Paltauf en lóbulos debido al desgarro de los septos alveolares. Los ahogados azules presentan, además, lesiones especiales de origen mecánico, como pueden ser: hemorragias bilaterales en la musculatura torácica, hongo espumoso a nivel bronquial y en los orificios respiratorios, presencia de arena o restos del medio en que se ahogaron en la zona de la traquea y los bronquios, además de partículas alimenticias regurgitadas por el estomago. Los pulmones atraviesan por un periodo enfisematoso y de tumefacción, denominado Enfisema Hidroaereo, los pulmones se hacen demasiado grandes y pesados. La sangra se diluye y decolora, el estomago se dilatador el agua, al igual que la membrana timpánica y son notables las lesiones producidas a nivel cardiovascular.
El medio líquido es rico en microbios y siempre se encuentra en constante movimiento, por lo que los individuos que fallecen a causa de asfixia por sumersion transitan por diferentes periodos durante el tiempo que se mantengan en la sustancia en que se ahogaron. Los retirados prontamente pueden presentar Piel de Gallina, retractación del pene y el escroto en los hombres y en las mujeres, de los pezones; además de que las livideces de todos los ahogados son precoces. Estos fenómenos se manifiestan en dependencia de la contracción pre o post mortem de las fibras musculares de la piel. Aquellos que pasan mas tiempo en el medio liquido experimentan un periodo de Inhibición donde el agua impide la deshidratación de los tejidos, las conjuntivas se inhiben de agua y se vuelven tumefactas. Se produce la maceración de la piel: ocurren cambios en la epidermis de manos y pies hasta desprenderse, lo cual permite al medico legista conocer el tiempo de estancia del cadáver en el agua. Le sigue un periodo de Arrastre donde el cuerpo primero se hunde progresivamente hasta adquirir un estado de inmovilidad a causa de la falta de corriente. El estacionamiento dura hasta el momento en que, bajo la influencia del gas de la putrefacción, remota también de forma progresiva, a la superficie y es de nuevo arrastrado por la corriente. En el curso de este desplazamiento, el cadáver sufre traumatismos a causa de golpes contra diversos obstáculos que encuentra en su trayectoria. Ya el periodo de Putrefacción evoluciona con características especiales, en el caso de los ahogados. Comienza por la cabeza, cuello y parte superior del tronco. Estas regiones se cubren de manchas verdosas que luego se tornan bronceadas. La putrefacción gaseosa invade el tejido celular subcutáneo y se produce la tumefacción en parpados y labios. La cara adquiere un aspecto llamado Cabeza de Negro. Adentrándose el cuerpo en los 2º y 3º meses de estancia en medio acuoso, la adipocira o grasa del cadáver comienza a formarse en las mejillas, mentón, pecho y cara anterior de los muslos. Pasado el 3er mes esta se presenta en los músculos. Si el medio en que se ahogo la persona es estiércol líquido amoniacal o agua tibia este proceso se evidencia de forma más breve y rápida. Para el 4º mes el cadáver sufre de incrustaciones calcáreas de la piel de los muslos, formando tubérculos duros y resistentes.
A la hora de formular su Diagnostico, el medico legista debe responder a cuatro preguntas esenciales:
- Conocer la identidad de la victima.
- Determinar si la sumersion es la verdadera causa de la muerte.
- Determinar la etiología de la sumersion, si fue esta la causa de la muerte.
- Computar el tiempo de estancia en el agua del cuerpo de la victima.